por esa misma razón podríamos quitarnos de encima a muchos incluso en primero de ESO, o en el colegio.
o meterlos a todos en una clase para "chavales tocapelotas" para que no estorben.
o directamente hacemos como la privada, no les admitimos, y fin del problema.
si es ésa la idea de educación que tenemos...
yo no digo que todo el mundo tenga que hacer una carrera, pero qué son 4 años de ESO? cualquiera es capaz de sacar 4 años de ESO, siempre que se le preste la atención adecuada lógicamente.
Hay chavales que no pueden seguir las mismas horas y asignaturas que la mayoría de alumnos, no, se aburren, no encuentran absolutamente nada que les llame en esas asignaturas, están en la fase rebelde... Pero eso no significa que no valgan. Lo que no vale es el sistema.
Yo conocí a un chico, ya en el colegio, que era verdaderamente problemático. Por cuestiones familiares y personales, el caso es que era un chico que no aguantaba ni 20 minutos sentado, se fugaba, insultaba (incluso agredía) a algunas profesoras, y a los que éramos sus compañeros de clase. Reventaba la clase, lo mismo lanzaba una silla contra la pizarra, que insultaba, o decía que se iba al patio. Le daba igual.
La mayoría de los profesores no sabían qué hacer con él. Estaba el profesor autoritario, que le castigaba, y seguramente en privado alguna vez le sacudió una buena hostia porque con aquel no se metía, aunque pasase de él completamente (el pasotismo se hizo mutuo xD).
Estaban las profesoras que le mandaban al pasillo para poder dar clase al menos sin él.
Y había una profesora, de la que tengo un gran recuerdo, que fue capaz de mantenerlo en clase, de integrarlo de nuevo. ¿Cómo? Yo era pequeño y no recuerdo cada detalle, pero sí algunas cosas que más tarde he comprendido. Os cuento:
Esta profesora tenía siempre una bolsa enorme llena de cacharros, juguetes, golosinas... de todo, era la bolsa de los regalos, nadie sabía exactamente qué había. Cuando alguien hacía algo muy bien, la profe le dejaba meter la mano en la bolsa y sacar 1 objeto, a ciegas claro, como premio. Lógicamente era un orgullo para cualquiera conseguir uno de esos regalos, toda la clase miraba deseando ver qué había tocado.
Como es normal, hasta el chico problemático deseaba conseguir uno de esos regalos. Y la profesora lo sabía.
Con mucha paciencia, sin levantar nunca el tono al chico se le fue ganando. Muchas veces hacíamos trabajos o actividades en grupo, como juegos o competiciones, ya fuese de matemáticas, manualidades, lectura de cuentos... lo que fuera. Nos lo pasábamos bien, y este chico aunque estaba acostumbrado a ganarse nuestra atención de otra forma, no podía competir con eso jeje.
Total, que la profesora consiguió que este chico se portase bien en sus clases, tenía que estar muy pendiente de él, tener cuidado, pero se le ganó. Y un día, no recuerdo por qué, consiguió su premio. La verdad es que yo recuerdo aquello como un triunfo de toda la clase, porque entre todos (la profe nos enseñó a ayudar al chico, no prestando atención cuando hacía ciertas cosas por ejemplo) habíamos recuperado a un compañero.
Desgraciadamente la historia no tiene final feliz. Este chico se fue haciendo mayor, tenía muchos profesores que no sabían manejarlo debidamente, sus padres tampoco debían saber qué hacer, y creo que terminó en un colegio para chicos delincuentes y agresivos...
Lo que hizo la profesora no era tan complicado, simplemente le trató bien siempre, le dio cosas que le interesasen, cuentos de terror, o lo que fuera, y se le ganó. Y no era un caso facil, porque que un mocoso que no te llega más que al culo te agreda... no creo que sea el tipo de chaval que hay en los institutos. Si aquella profesora pudo, ¿por qué no se va a poder con chavales más mayores?
No se trata de echar al que no vale, para eso ya está la escuela privada, se trata de adaptarse a cada alumno. Claro, para eso hace falta formar al profesorado. Aquella profesora se informó, preguntó a especialistas cómo actuar, y tuvo mucha paciencia. Y además de formar al profesorado, hace falta que en las clases no haya 40 alumnos por profesor, porque con 40 no te da tiempo ni a decir "hola" a cada uno.